La iluminación es fundamental a la hora de crear un buen ambiente de estudio. Quien debe pasar horas delante de libros o de apuntes sabe bien lo importante que es elegir el mejor flexo para estudiar, y cómo esta elección puede influir en el rendimiento y en la salud ocular.
Los flexo LED o lámparas de estudio suministran luz de manera focalizada para alumbrar, principalmente, zonas dedicadas al estudio, trabajo, oficinas, espacios dedicados a la costura o a la creación de elementos de decoración, manualidades, etc.
Dependiendo del tipo de apyo podemos encontrar flexos de brazo fijo, flexos con brazos articulados, flexos de pinza…
A continuación, en Ledbox te damos 3 claves para elegir el mejor flexo para estudiar en función de tus necesidades.
Valora el espacio de estudio disponible
Los flexos de brazos flexibles o de brazos basculantes son ideales para escritorios pequeños, que queremos aprovechar al máximo.
Si dispones de más espacio, puedes elegir un flexo de brazos articulados, que proporcionará una amplia cobertura de luz sobre toda tu superficie de estudio.
Por último, si lo que buscas es un flexo ligero y fácil de transportar, porque viajas mucho o porque no dispones de un espacio de estudio concreto, puedes optar por un flexo de pinza.
El mejor flexo para estudiar te aporta la luz que necesitas
Cada persona prefiere un tipo de luz diferente para estudiar con mayor comodidad. Las luces frías potencian la actividad, y logran que nos mantengamos mejor la concentración. Por su parte, las luces cálidas permiten que la vista se relaje más, y son las preferidas por muchos estudiantes. Algunos flexos ofrecen una luz blanca dual, que nos permite cambiar la tonalidad en el momento en el que lo deseemos, e incluso regular su intensidad para adaptarla a nuestras necesidades.
Elige un flexo con tecnología led
Un flexo con tecnología LED ayuda a que nuestros ojos estén en perfectas condiciones después de un largo día de estudio, y reduce al mínimo las probabilidades de sufrir migrañas o dolores de cabeza por culpa de una vista cansada. Además, con este tipo de flexos ahorraremos en la factura de la luz, porque su consumo es mucho más eficiente que el de los flexos tradicionales. Y cuando se trata de una actividad a la que le dedicamos tantas horas como al estudio, esto se nota.