Una parte importante del éxito de un establecimiento es su imagen, y una parte importante de esa imagen es la iluminación. Según indican estudios de consumo, el color de los productos frescos es el atributo más importante para el cliente a la hora de decidir su compra. Una buena iluminación de los expositores resaltan los colores naturales y el producto exhibe una imagen fresca y sugerente. Un buen proyecto de iluminación es vital para sacar el máximo partido a los productos ya que un exceso de luz o la elección de la fuente equivocada puede decolorar los productos frescos y hacerlos menos apetecibles.
Quizá la sección que adquiere más relevancia dentro de los supermercados son los expositores de alimentos frescos. Es aquí donde el comprador decide tanto el nivel de servicio del comercio como la calidad de los productos expuestos. La iluminación de expositores es un factor clave que distingue un comercio normal de uno superior. Una buena iluminación realza el color y la naturalidad de los productos, captando la atención de los clientes y despertando y estimulando su interés en los productos. Los clientes siempre asocian el aspecto de los productos frescos con su sabor y en la gran mayoría de las ocasiones se dejan llevar por la vista a la hora de tomar una decisión de compra.
Es complicado decir el ahorro energético que puede aportar la iluminación led en los supermercados y que cada uno tiene sus propias particularidades. varían entre ellos luz, natural, productos o tamaño pero podríamos decir que en general se podrían conseguir ahorros de hasta el 50% en energía.
Las luminarias LEDs no sólo iluminan el interior de los supermercados, el ahorro aumentará si se instalan en los exteriores, parkings, ascensores o rótulos luminosos.
A todo esto hay que tener en cuenta también que gracias a la larga vida útil de las luminarias LEDs los rótulos brillarán durante años sin ningún tipo de fallos ahorrando en repuestos y mantenimiento. En las lámparas tradicionales fluorescentes, al ser más sensibles a las vibraciones y al frío (su ciclo de vida en condiciones de congelación es de entre 6 y 12 meses), el flujo luminoso disminuye rápidamente creando manchas borrosas, un efecto que al cliente le resulta visualmente desagradable.
La tecnología LED ayuda a un óptimo mantenimiento de los productos sobre todo los frescos. Los LEDs no emiten calor, ni rayos UVA ni infrarrojos y por ello son idóneos para iluminar los productos que se ofrece al consumidor. la sustitución unidades de luz en los muebles frigoríficos permite que no se deterioren los alimentos en áreas especialmente conflictivos como la carnicería, donde se perdía mucha mercancía.
La sostenibilidad es muy importante para las marcas, los supermercados no son ajenos a esta tendencia. La eficiencia de la tecnología LED a la hora de reducir el impacto medioambiental, ha hecho que muchas cadenas de distribución alimentaria la incluyan en sus planes de reducción de emisiones CO2. A este dato tendríamos que tener sumar el ahorro ocasionado por el menor consumo en aire acondicionado en los supermercados equipados con iluminación LED, ya que esta tecnología no genera calor. Por último cabe apuntar que las luminarias LED duran hasta 8 veces más que las estándares con lo que se genera menos residuos para el planeta.
El grupo Carrefour llevó a cabo la sustitución de las lámparas tradicionales por LEDs para conseguir disminuir un 40% las emisiones de CO2 en 2020, teniendo como referencia las del año 2009.
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