Quizás nunca se haya parado a pensar cómo puede influir el diseño del interior de una oficina en el desarrollo del trabajo y la productividad de sus trabajadores. Hemos de decir, que en el interior de una oficina moderna debe pensarse, y mucho, hasta el más mínimo detalle.
Entonces, ¿cuáles son los puntos principales que afectan la atmósfera dentro del equipo de trabajo y la productividad general del mismo? ¿Por qué las empresas de fama mundial contratan diseñadores profesionales para diseñar el interior del espacio de las oficinas? Para responder a estas preguntas, hay que entender primero cómo el diseño y la disposición de un espacio de oficina, afectan al estado de ánimo de las personas y las llevan, o no, al éxito.
A continuación trataremos los puntos más importantes a tener en cuenta a la hora de diseñar una oficina de trabajo de la manera más eficiente posible.
La principal regla que debemos tener siempre en cuenta, en cuanto al color del interior de una oficina, es no utilizar colores demasiado fuertes y brillantes, pues de ese modo se sobrecargarán los centros visuales y las personas que allí trabajan se cansarán rápidamente e incluso se pueden volver algo irritables.
Un buen diseño de oficina debe llevar una composición única en el esquema de color. Por ejemplo, una habitación en tonos grises o beiges, serán una buena base para experimentar con la creatividad. En este caso podría agregar algún detalle que destaque en la oficina, como algunas sillas en tonos más vistosos que le den un aire elegante al espacio y que hagan un bonito contraste.
También hay que tener en cuenta que los tonos fríos crean estrés mental, por lo que no se debe pintar las paredes nunca en un tono azul por ejemplo.
Utilice siempre colores cálidos que actúen como relajantes y no causen apatía ni agresividad.
Las oficinas en espacios diáfanos tienen sus pros y sus contras. Uno de sus pros más destacado sería la eficiencia en el trabajo, pues los empleados sienten una sensación constante de ser observados y, esto hace que no se distraigan tanto con otros asuntos. En cambio, uno de sus contras más importante es que los espacios diáfanos acaban creando una fuerte tensión nerviosa, lo que hace que los trabajadores acaben quemándose rápidamente, y terminen renunciando al puesto, en busca de un lugar más cómodo para trabajar.
Una buena solución a estos espacios puede ser hacer particiones móviles. Son unas pantallas que se instalan entre mesas, creando así una zona de privacidad sin perder espacio de oficina útil.
Algo a tener en cuenta también a la hora de diseñar una oficina es que la productividad del trabajo se ve afectada por la forma en que se diseña ese lugar.
La comodidad se puede crear de varias maneras. Una idea interesante podría ser decorar la oficina con un gran panel o pintura en una de las paredes de la estancia. Puede reemplazar a las persianas aburridas con las típicas cortinas de tela.
Además puede complementar el interior con algunos acogedores muebles tapizados, para que los empleados puedan llegar a sentirse como en casa.
Algo a valorar bastante en las empresas, debería ser la disposición de un área de recreación para los empleados. Esto ayuda a aumentar significativamente la productividad laboral. Pues los empleados saben que pueden tomarse un breve descanso del trabajo, y restablecerse tranquilamente en un rincón tranquilo.
Los estudios demuestran que es mejor amueblar esas áreas con sofás dobles y sillones clásicos, y no colocar únicamente un sofá grande, pues esto haría que los empleados se sintieran incómodos al tener que pelear diariamente por ver quien coge el sitio primero.
Una afirmación positiva es que cuantas más plantas vivas o artificiales haya en una oficina, más tranquilos se sentirán los empleados Esto se debe a que una persona en su nivel subconsciente considera la abundancia de vegetación como una isla segura en la que esconderse, creando esa sensación de calma y tranquilidad.
Esto puede aplicarse no solo a las plantas, sino también a cualquier elemento natural como pequeñas fuentes de mesa, una pared con una lámpara de burbujas, muebles de madera, etc.
Es muy importante elegir la iluminación adecuada en la oficina.
La luz fría y azulada imita la luz de la luna, lo que hace que inconscientemente la reconozcamos como nocturna. Por lo que la productividad en tales condiciones será prácticamente nula.
La luz blanco cálido es similar a la iluminación del amanecer o del atardecer y es una de las más efectivas para estimular el trabajo. El cuerpo piensa que ahora es solo el comienzo del día y es necesario activar todas las fuerzas y recargar de energía. Sin embargo, es imposible trabajar durante mucho tiempo con esa iluminación, pues la fatiga se presentaría rápidamente después de un aumento de fuerza tan intenso.
La luz blanco neutro imita mejor el sol del mediodía, por lo que sería la mejor opción para trabajar en unas condiciones óptimas. La mejor distribución de las fuentes de luz sería instalar varias repartidas en diferentes puntos de la oficina. Y aún mejor, si se organizara la iluminación de forma personal con la ayuda de una lámpara de pie o de mesa en cada lugar de trabajo.
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