A pesar de que las luces no suelen tenerse en cuenta a la hora de construir una piscina, pueden llegar a marcar la diferencia entre una piscina común y corriente y un auténtico oasis. Por este motivo es impórtate saber como funciona la iluminación piscinas con LED.
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Las luces LED son uno de los inventos para la iluminación piscinas que más ha triunfado en estos últimos años, por lo que será el objeto que necesita toda piscina para coronarse como nuevo oasis de la relajación.
Una de las ventajas principales respecto a otras bombillas es que consumen mucho menos. Esto hace que la eficiencia de estas luces sea única, y que tengas que gastar menos. En concreto, en torno a un 90% de la energía que necesitan es usada como energía lumínica, por lo que el rendimiento que ofrecen es muy alto, ya que se desperdicia poca energía.
Gracias a su alta eficiencia, no necesitan consumir tanto como una luz convencional, por lo que te ahorrarás dinero en consumo. A la larga, notarás como la factura de la luz disminuye gracias a estas luces.
Especialmente en estos tiempos difíciles en los que la factura de la luz parece no tener límites, es de especial interés contar con luces LED. Así que como ya has visto, las luces LED para piscinas ayudan tanto al medioambiente como a tu bolsillo.
Un aspecto importante de las luces LED es la vida que tienen. Si vas a instalar luces para la iluminación de tu piscina te interesa que tengan una vida larga, ya que para cambiarlas se debe vaciar la piscina, y eso ocasiona un gasto alto a la hora de vaciar la piscina.
Las luces LED ofrecen una vida más larga respecto a las bombillas convencionales, por lo que cumplen de nuevo este requisito importante, superando incluso las expectativas.
Las luces convencionales no ofrecen una gama de color amplia. En cambio, hay luces LED que gracias a un mando podrás adaptarlas y cambiarlas de color cuantas veces desees.
Uno de los problemas más clásicos de instalar en una piscina luces es que pueden ser dañadas fácilmente por el agua en cuanto haya una fuga.
Las luces LED en cambio, ofrecen una mayor resistencia que cualquier otro tipo de elemento de iluminación piscina, especialmente contra el agua salada que es más agresiva con las luces. Aunque haya alguna fuga o problema en tu piscina, gracias a la resistencia con la que cuentan no hará falta que las cambies a no ser que hayan sido gravemente dañadas.
Una de las características que más destaca de las luces LED es la facilidad que tienen para adaptarse a diferentes circunstancias. Esto hace que haya una mayor variedad de opciones a la hora de instalarlas en tu piscina, más allá de las clásicas opciones de poner luces en las paredes o el fondo. Además, gracias a su gran rendimiento, son luces que no producen apenas calor, por lo que puedes ponerlas también cerca de materiales que no es recomendable que se expongan a altas temperaturas, sin tener miedo de que las luces afecten y puedan dañarlo.
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